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¿Existe la Isla del Tesoro que narró Stevenson?

El famoso escritor Robert Louis Stevenson se basó en la isla de Upolu en Samoa para escribir su novela “La isla del tesoro”.

Stevenson visitó Samoa en 1889 y se enamoró de la belleza natural y la cultura de las islas, donde finalmente decidió establecer su hogar y pasar el resto de su vida. Upolu es la segunda isla más grande de Samoa y se encuentra en el Pacífico Sur, al este de Australia y al norte de Nueva Zelanda.

En realidad, no se ha encontrado evidencia de que haya tesoros reales en la isla de Upolu o en Samoa en general.

La novela “La isla del tesoro” de Robert Louis Stevenson (“Treasure Island” en inglés) es una obra de ficción y la historia del tesoro enterrado en la isla es una invención del autor para crear una emocionante aventura de piratas.

Sin embargo, la belleza natural de Samoa y su rica cultura han atraído a muchos visitantes y exploradores a lo largo de los años y algunos en busca de tesoros.

Si bien la leyenda del tesoro en la isla de Upolu de “La isla del tesoro” es ficticia, la isla y la región circundante han sido objeto de exploración por parte de aventureros y arqueólogos en busca de reliquias y objetos históricos.

A lo largo de los años, se han descubierto varios sitios arqueológicos antiguos en Samoa, incluidos templos, tumbas y herramientas de piedra tallada.

Además, hay varias historias y leyendas sobre tesoros reales en otras partes del mundo, algunos de los cuales han sido encontrados y otros siguen siendo un misterio.

la idea de que los piratas enterraban tesoros es una leyenda popular que se ha difundido a través de la literatura y el cine. Se dice que los piratas enterraban sus tesoros en lugares secretos, para evitar que fueran robados o confiscados por otros piratas o autoridades marítimas.

Los lugares donde se enterraban los tesoros a menudo se marcaban con señales o mapas secretos, que solo los piratas que participaron en la incursión conocían.

Sin embargo, la realidad es que no hay muchas evidencias históricas de que los piratas hayan enterrado grandes cantidades de oro y plata. A menudo, los tesoros obtenidos por los piratas se gastaban rápidamente en la compra de bienes y servicios, y en ocasiones se dividían en partes iguales entre los miembros de la tripulación.

Además, muchos de los tesoros que los piratas conseguían eran objetos como joyas, sedas, especias y otras mercancías valiosas, que no se prestaban bien para ser enterrados en el suelo.

Mucho menos el ron…